Actualmente vivimos en una era postmoderna "tecnologizada", la cual nos ha ayudado a evolucionar y avanzar a pasos gigantescos, pero que puede ser igualmente responsable de un gran dilema que nos frena, bloquea y entorpece, sobre todo a nivel personal –a veces también en lo profesional-: "Estoy abrumado/a, estresado/a,perdido/a, desmotivado/a… ¿Debo acudir al psicólogo?, ¿Cuándo?, ¿Tengo que ir al psicólogo aunque no esté “loco”? Muchas personas siguen pensando que ir al psicólogo es "cosa de locos" o de personas extremadamente hundidas.
Si nos paramos a reflexionar un momento, nos daremos cuenta que la sociedad actual corre desmesuradamente, enseñándonos a ser los/asmejores, a competir entre nosotros/as y no a cooperar, a estar a la última en todo. Trabajo, hogar, imagen personal, nutrición… Estamos dejando de ser personas para ser máquinas. Máquinas esclavas del orden social, sin descanso, que olvida su parte emocional, su humanidad.
Llega un momento en nuestras vidas en que no podemos más, el vaso está a rebosar de la multitud de cargas y responsabilidades. Cuando estamos en este punto, en ocasiones, cualquier complicación se nos hace un mundo, desembocando en una crisis emocional, un malestar interno y un desequilibrio. O por el contrario, cuando conseguimos encontrar paz y tranquilidad surgen los conflictos internos por el hecho de haber estado tantos años enfocados en lo laboral o en cualquier otro asunto que nos haya disociado de nuestra parte emocional, de nuestro mundo interno. Entonces es el momento de plantearnos qué debemos hacer.
Signos para acudir a un psicólogo/a.
Resumido de manera general hemos aportado algunos de los signos o señales más comunes :
- Estrés
- Ansiedad
- Cansancio y pérdida de vitalidad
- Flujo de pensamientos negativos y desmotivación
- Auto-desvaloración, apatía
- Rabia y agresividad
- Tristeza
- Complicación de la relaciones personales –amistades, familia, pareja, laboral-
- Rupturas, duelo, conflictos relacionados con traumas…