Si pensamos en el significado de la palabra dependencia, podemos hacer un ejercicio simple al separar sus componentes: de-pender. Si buscamos el significado de la segunda palabra, podemos dibujar una imagen de lo que tenemos en frente cuando la asociamos a una relación: la dependencia representa que NECESITAMOS algo del otro para sobrevivir en esa relación, al igual que cuando un recién nacido necesita a su madre, es una dependencia física, natural y que deja de serlo al cabo de los años.
Basándonos en estos principios, cuando estamos en una relación de pareja que es dependiente, es probablemente porque basamos dicha relación en una necesidad, lo que a su vez se sostiene en la idea de la carencia. Esa carencia no debe ser corregida a partir de la pareja, ya que es mucho mejor definirla y compensarla de una manera saludable. Una relación de pareja sana no se basa en necesitar al otro, sino en preferirlo.
Cuando entramos en una espiral de dependencia, solemos situarnos por debajo de la otra persona: suele ser evidente el desequilibrio de poder entre los miembros de la pareja y es común que pasemos a un estado de sumisión que nos hace incluso temer la perdida de nuestra propia identidad.
Estos son algunos de los indicadores de las relaciones de dependencia, en general:
- Búsqueda continua de relaciones de pareja.
- Deseo insaciable de estar con la otra persona.
- Tendencia a planificar la vida y el futuro en base a los proyectos de la otra persona, llegando a renunciar a nuestros propios proyectos.
- Sensación de que no se funciona igual sin esa persona: no hay felicidad, seguridad ni sentido vital.
- Falta de respuesta ante la vulneración de los propios principios por parte del otro: perdemos la dignidad y el auto-gobierno.
- Subordinación a la pareja.
- Baja autoestima.
- Excesivo miedo a la ruptura.
- Deseo continuo de agradar al otro.
- Tendencia a priorizar al otro por delante de uno mismo.
- Respeto mútuo.
- Reconocimiento del otro.
- Empatía.
- Compartir ideales, aficiones y gustos que alimentan el enriquecimiento mutuo.
- Cuidado desinteresado por el otro.
- Voluntad para llegar a un acuerdo por ambas partes cuando no coincidan.
- Nadie está por debajo o por encima.
- Intercambio de opiniones y pensamientos: libertad de expresión mutua.
- Autoestima propia. Es un elemento esencial para que se forme una relación de pareja saludable.