¿Te conoces? ¿Sabes lo que te gusta y te hace feliz? ¿Sabes decir tres aspectos positivos de ti mismo? Muchas veces la repuesta es “sí”, pero si nos paramos a pensar, dudamos.
El día a día y el ritmo de vida que llevamos dificulta tener tiempo para nosotros mismos. Es importante cuidarnos, conocernos y sobre todo, valorarnos. Cuando aprendamos a valorarnos, sabremos valorar a los demás. Invertir en uno mismo es crecer, ir cargando la mochila de experiencias, de objetivos y de metas.
Para algunos, esta inversión tendrá forma de momentos como prepararse una buena taza de café caliente por la mañana. Para otros, poder leer su libro favorito en el parque, ir al gimnasio por las mañanas, viajar… estos pequeños placeres son los que hemos de cuidar y potenciar. Placeres que nos conectan con nuestro yo interior, que nos permiten reflexionar sobre qué queremos, cómo lo queremos y a quién queremos a nuestro lado. Esto es tan importante como es aceptarnos y ver las debilidades como oportunidades para mejorar. Hemos de plantearnos salir del área de confort, hacer actividades nuevas, enfrenarnos a nuestros miedos, conocer gente…
El bienestar que nos proporcionarán estas situaciones se traducirá en una mayor autoestima, un mejor autoconocimiento y la regulación de nuestro estado de ánimo. Mejorando así nuestro entorno y la relación con nuestra pareja, hijos y familia.
Aquel entorno que nos hace ser como somos, que forma parte de nosotros y nosotros de él. Aquel entorno que sabrá reconocer nuestros puntos positivos y virtudes, aunque a nosotros nos cueste más y nos sea más fácil encontrar las debilidades.
Anna Costa
Aprender a cuidarnos y aceptarnos
¿Te conoces? ¿Sabes lo que te gusta y te hace feliz? ¿Sabes decir tres aspectos positivos de ti mismo?